Sin diálogo, sigue el conflicto por los sueldos municipales de Centenario

Tras las declaraciones públicas de la secretaria de Gobierno, Tanya Bertoldi, el Municipio cerró las conversaciones con el sindicato por una «reestructuración salarial».

El viernes pasado, la secretaria de gobierno de Centenario, Tanya Bertoldi, adelantó en medios radiales que habría una «reestructuración salarial» con los haberes de mayo. Sostuvo que sería acordada con los empleados municipales, pero desde el sindicato que los agrupa sostienen que el Ejecutivo local cerró el diálogo: «no contestaron ninguna de las tres notas que enviamos».

Así lo informó el secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados de la Municipalidad de Centenario (SOEMC), Cristian Salazar. Remarcó que no van a aceptar un recorte en los sueldos, que pueda afectar a los trabajadores.

El intendente Javier Bertoldi y la secretaria de gobierno Tanya Bertoldi fueron consultados por Río Negro, pero se negaron a brindar declaraciones.

El viernes pasado, la funcionaria afirmó en medios radiales que habría una «reestructuración salarial» en los haberes de mayo. Además, expresó que había sido conversada con los empleados municipales, quienes entendían el «complejo contexto».

La secretaria de Gobierno sostuvo que las cuentas del Municipio están complicadas «como en toda la provincia», por el recorte del 32% en la coparticipación de mayo. Agregó que en junio la rebaja probablemente sea mayor, por lo que las cuentas se verán afectadas todavía más que en el mes anterior.

Tanya Bertoldi indicó que la masa salarial es de 1.300 empleados, lo que «consume el 90%» de los ingresos municipales. Insistió en que «están muy complicados» para abonar la totalidad de los sueldos de mayo, aunque enfatizó que se conversaría con el gremio.

El secretario general del gremio, Salazar, remarcó que venían teniendo un diálogo constante con el Municipio y que estaban acordando que los adicionales por capacitación se pagaran en forma no remunerativa, como propuso el gobierno local, a partir de junio, por tres meses.

Sin embargo, recalcó que no se había firmado, pues faltaba que lo aceptaran los delegados, y que el municipio lo dio como válido sin tener una respuesta favorable. Sostuvo que a una parte de la planta municipal se le liquidó de esa manera, con los salarios de abril, aunque no se haya acordado.

Salazar fue tajante y aseveró que no permitirán que se aplique una «reestructuración salarial», en detrimento de los trabajadores. Subrayó que luego de brindar las declaraciones públicas, la secretaria de Gobierno no volvió a contestarle al gremio y cerró los canales de diálogos. Aseguró que ni la funcionara ni el intendente contestaron las tres notas que enviaron al Ejecutivo, solicitando que aclare la situación salarial.